Un palo de lluvia o palo de agua es un tubo largo y hueco rellenado con pequeñas piedras o semillas, en cuyo interior se clavan palitos de bambú o de madera, formando una espiral que se extiende a todo lo largo. Cuando el tubo se inclina suavemente las semillas caen y su golpeteo con los palitos produce un sonido que se asemeja a la lluvia o agua cayendo.
¡Nosotros hemos fabricado los nuestros!

Primero une varios tubos de cartón del papel higiénico o de cocina.

¡Lo puedes hacer todo lo largo que quieras!

Con un rotulador pinta una espiral de puntitos a lo largo del palo. Luego con la ayuda de un punzón, haz un agujero en cada punto y clava un palillo.

Visto más de cerca queda así

Toca decorarlo como más te guste

¡Quedan preciosos! Y el sonido es tan relajante...